viernes, 25 de abril de 2008

Petróleo: crisis constitucional






John Saxe-Fernández
La Jornada, México,

24 de abril de 2008.


Como hace 20 años y bajo otro régimen de usurpación electoral, estamos sumidos en una crisis constitucional y de legitimidad de orden mayor. La ofensiva contra la normatividad de la Carta Magna vigente en materia petrolera, impulsada por Estados Unidos y un grupo de empresas contratistas –locales y extranjeras– por medio de una iniciativa energética con endoso formal de Felipe Calderón, fue enviada al Congreso el 10 de abril. Desde entonces Los Pinos actúa como sugirió el aparato publicitario y de espionaje estadunidense en México: una vez tomada la decisión de privatizar y entregar la renta petrolera, “todo se reduce a un juego de relaciones públicas”.

Salinas profundizó la privatización de facto, mientras “aseguraba” al público mexicano que Pemex “no se privatizaba” y que “el petróleo seguiría siendo de los mexicanos”.


Salinas profundizó la privatización de facto, mientras “aseguraba” al público mexicano que Pemex “no se privatizaba” y que “el petróleo seguiría siendo de los mexicanos”.

En un análisis realizado para el Congreso estadunidense por la Comisión de Comercio Internacional (CCI), uno de los cabildos más poderosos, se decía que, “por razones de seguridad nacional, México no incluirá al petróleo en el TLC, aunque las autoridades mexicanas estudian ya mecanismos alternativos que, sin modificar la Constitución y conservando para Pemex el control nominal sobre el hidrocarburo, permitan la participación extranjera en ese sector, por medio de empresas conjuntas, arrendamientos, contratos para la exploración y subcontratación de diferentes servicios” (La compra-venta de México, 2002, p. 314). Según la CCI, “... se afirmaría el interés nacional de EU”, ya que “Pemex es candidato a la liberación en el futuro y la paraestatal será reorganizada en varias divisiones, lo que parece ser el primer paso para abrir el camino a la inversión foránea”. Como hacen Felipe Calderón y Reyes Heroles hijo, los encargados de entonces siguieron el guión de la Casa Blanca y las petroleras.

Ni la vigencia del estado de derecho o las trabas constitucionales a la participación extranjera en Pemex preocupan a la CCI, cuyo análisis confidencial celebraba que “el actual régimen mexicano ha dado muestras de desapego al ordenamiento constitucional por su inclinación de aplicar mecanismos que le den la vuelta a la Constitución”. Luego, con maña, agregó: “… la actitud del gobierno tiene más que ver con la seguridad nacional que con una auténtica reverencia por la Constitución, por lo que no se considera que nuevas reformas serán gran problema”. Pero esa “seguridad nacional” mencionada por la CCI es la de Estados Unidos, no la de México. Como percibió Michael Wilson, de la Fundación Heritage, para Salinas “la seguridad mexicana es parte de la seguridad nacional de Estados Unidos”. También para Calderón, cuyo polkismo lo corroboró al inicio del sexenio Tony Garza, embajador de Estados Unidos.

En la versión polka, México sería un “apéndice” de la potencia norteña. Más grave: esto ocurre en un contexto de anexionismo sui generis (“integración profunda”) y de unilateralidad policial-militar (ASPAN-Iniciativa Mérida) que pone en grave riesgo la noción misma de México como Estado-nación soberano e independiente y, por tanto, la seguridad nacional. Pero las fuerzas armadas de México sólo operan con legitimidad bajo el supuesto de que “la seguridad mexicana” está subsumida en la “soberanía” formalizada en la Constitución vigente. En sentido estricto quienes desde el Ejecutivo o Legislativo auspician la entrega de la renta petrolera por medio de modificaciones a las leyes que regulan el artículo 27 son “transgresores constitucionales” carentes de legitimidad para el ejercicio de la administración pública y el uso de los instrumentos policial-militares en la jurisdicción territorial federal y donde están localizados los recursos naturales codiciados por Washington.

La traición se consuma, como advirtió el general Lázaro Cárdenas, con “engendros que inconstitucionalmente vuelven a reconocer a favor de titulares extranjeros, derechos y prerrogativas que les son explícitamente negados por la Constitución”.

miércoles, 23 de abril de 2008

DENUNCIEMOS LA CONSPIRACIÓN PARA DIVIDIR A BOLIVIA

El proceso de cambios a favor de las mayorías en Bolivia, corre el riesgo de ser brutalmente coartado. El ascenso al poder de un presidente indígena, electo con un respaldo sin precedentes en ese país, y sus programas de beneficio popular y de recuperación de los recursos naturales, han tenido que enfrentar desde los primeros momentos las conspiraciones oligárquicas y la injerencia imperial.
En los días más recientes, la escalada conspirativa ha alcanzado sus cotas máximas. Las acciones subversivas y anticonstitucionales con que los grupos oligárquicos pretenden dividir la nación boliviana, reflejan la mentalidad racista y elitista de estos sectores y constituyen un peligrosísimo precedente, no sólo para la integridad de ese país, sino también para la de otros países de nuestra región.
La historia muestra con sobrada elocuencia las terribles consecuencias que en todos los terrenos han tenido para la humanidad los procesos divisionistas y separatistas inducidos y respaldados por poderosos intereses foráneos.
Ante esta situación, los abajo firmantes queremos expresar nuestro respaldo al gobierno del Presidente Evo Morales Ayma, a sus políticas de cambio y al proceso constituyente soberano del pueblo boliviano. Al propio tiempo, rechazamos el llamado Estatuto autonómico de Santa Cruz por su carácter inconstitucional y por atentar contra la unidad de una nación de nuestra América.
Llamamos a todas las personas de buena voluntad a que unan sus voces para denunciar por todas las vías posibles esta maniobra divisionista y desestabilizadora en una hora histórica para la América Latina.

Adolfo Pérez Esquivel (Argentina); Rigoberta Menchú (Guatemala); Noam Chomsky (EEUU); Oscar Niemeyer (Brasil); Eduardo Galeano (Uruguay); Ignacio Ramonet (España/Francia); Elena Poniatowska (México); Frei Betto (Brasil); Gianni Vattimo (Italia); Adolfo Sánchez Vázquéz (España/México); Ernesto Cardenal (Nicaragua); Armand Mattelart (Bélgica); Ramsey Clark (EEUU); Manu Chao (Francia/España); Franz Hinkelammert (Alemania/Costa Rica); Francois Houtart (Bélgica); Alfonso Sastre (España); Paul Leduc (México); Fernando Pino Solanas (Argentina); Roberto Fernández Retamar (Cuba); Howard Zinn (EEUU); Keith Ellis (Canadá); Jorge Enrique Adoum (Ecuador); Belén Gopegui (España); Arturo Roig (Argentina), Jesusa Rodríguez (México); Stella Calloni (Argentina); Joao Pedro Stedile (Brasil); Eric Toussaint (Bélgica); Rafael Cancel Miranda (Puerto Rico); Richard Gott (Reino Unido); Miguel D'Escoto (Nicaragua); Silvio Rodríguez (Cuba); Carmen Bohórquez (Venezuela); Víctor Heredia (Argentina); Blanca Chancosa (Ecuador); Thiago de Mello (Brasil); Juan Mari Bras (Puerto Rico); Hildebrando Pérez (Perú); Pascual Serrano (España); Fernando Rendón (Colombia); Víctor Víctor (República Dominicana); Luisa Vicioso (Rep. Dominicana); Cecilia Todd (Venezuela); Alex Cox (Reino Unido); Danny Rivera (Puerto Rico); Isaac Rosa (España); Jean Marie Binoche (Francia); Ramón Chao (España/Francia); Pablo Guayasamín (Ecuador); Andrés Sorel (España); Ariel Dorfman (Chile); Carlo Frabetti (Italia/España); Carlos Fazio (México); Manuel Cabieses (Chile); Carlos Fernández Liria (España); Cintio Vitier (Cuba); Héctor Díaz-Polanco (Rep. Dominicana/México); Javier Couso Permuy (España); Jaime Caycedo (Colombia); Fernando Martínez Heredia (Cuba); Isabel Parra (Chile); James Cockcroft (EEUU); Fina García Marruz (Cuba); Fernando Morais (Brasil); Juan Madrid (España); Pablo Marcano García (Puerto Rico); Graziella Pogolotti (Cuba); Piero Gleijeses (Italia/EEUU); Raúl Pérez Torres (Ecuador); Miguel Barnet (Cuba); Roberto Diaz Castillo (Guatemala); Nancy Morejón (Cuba); Salim Lamrani (Francia); Santiago Alba Rico (España); Saul Landau (EEUU); Stefania Mosca (Venezuela); Víctor Flores Olea (México); Wim Dierckxsens (Costa Rica); Wozniak (Polonia); Eric Nepomuceno (Brasil); Aldo Díaz Lacayo (Nicaragua); Alfredo Vera (Ecuador); Angel Augier (Cuba); Antonio Elías (Uruguay); Beverly Keene (Argentina/EEUU); Constantino Bértolo (España); Michel Collon (Bélgica); Juan Carlos Camaño (Argentina); César López (Cuba); Emir Sader (Brasil); Fernando Buen Abad Domínguez (México); Eduardo Torres-Cuevas (Cuba); Gennaro Carotenuto (Italia); Gilberto Maringoni (Brasil);Gloria la Riva (EEUU); Hernando Calvo Ospina (Colombia); Higinio Polo (España); Iván Padilla (Venezuela); Jaime Sarusky (Cuba); James Early (EEUU); Jorge Beinstein (Argentina); Jorge Sanjinés (Bolivia); José Steinsleger (Argentina/México); Julio César Monge (El Salvador); Lasse Söderberg (Suecia); José Hugo Moldiz Mercado (Bolivia); José Pertierra (Cuba/EEUU); Luciano Vasapollo (Italia); Luis Bilbao (Argentina); Manuel Talens (España); Marcos Roitman (Chile): Marlon Santi (Ecuador); Matías Bosch (Rep. Dominicana); Michele Mattelart (Francia); Montserrat Ponsa Tarres (España); Néstor Kohan (Argentina); Pablo Armando Fernández (Cuba); Roberto Montoya (Argentina/España); Sergio Trabucco (Chile); Medea Benjamín (EEUU); Reynaldo González (Cuba); Roberto Sánchez Ramos (España); Setsuko Ono (Japón/EEUU); Vicente Battista (Argentina); Vicente Rodríguez Nietzsche (Puerto Rico); Winston Orrillo Ledesma (Perú); Alberto Lecci (Argentina); Alejandro Moreano (Ecuador); Alessandra Riccio (Italia); Alicia Jrapko (EEUU); Ana Esther Ceceña (México); Angel Juarez Almendros (España); Antoine Chao (Francia); Ángeles Maestro (España); Antón Arrufat (Cuba); Aram Aharonian (Uruguay); Claudia Camba (Argentina); Carilda Oliver Labra (Cuba); Claudia Korol (Argentina); Daniel Lorenzi (Italia); David Acera (España); Faride Zeran (Chile); Diosdado Toledano (España); Félix Julio Alfonso López (Cuba); Francisco (Pancho) Villa (Chile); Irene Amador (Colombia); Francisco de Oraa (Cuba); Jane Franklin (EEUU); Humberto Arenal (Cuba); Juan Brom (México); Lisette Nicole Adoum (Suiza); Jorge Ibarra (Cuba); Luciano Alzaga (Argentina); Marilia Guimaraes (Brasil); José Ignacio López Vigil (Cuba); Manuel de la Rica (España); Maximilien Arvelaiz (Venezuela); Leonardo Acosta (Cuba); Miguel Mirra (Argentina); Milagros Rivera Rérez (Puerto Rico); Oscar-René Vargas (Nicaragua); Osvaldo León (Ecuador); Paulo Nakatani (Brasil); Pepe Viñoles (Uruguay); Red Ronnie (Italia); Rolando Rodríguez (Cuba); Sara Rosemberg (Argentina); Vicente Romano (España); Sergio Ortiz (Argentina); Yamandú Acosta (Uruguay); Antonio Cuesta (España); Antonio Gaztambide (Puerto Rico); Coriún Aharonian (Uruguay); Rosa Miriam Elizalde (Cuba); Daniel del Solar (EEUU); Ángel Guerra (Cuba); Edgar Páez (Venezuela); Eva Golinger (EEUU); Guillermo C. Cohen-DeGovia (México); Estrella Rey (Cuba); Hiram Guadalupe Pérez (Puerto Rico); Humberto Mata (Venezuela); Isabel Monal (Cuba); Jhonny Jiménez (Ecuador); Joseba Macías (País Vasco); Juan Carlos Monedero (España); Julio Pomar (México); René Vázquez Díaz (Cuba); Liliana Játiva (Ecuador); Daniel das Neves (Argentina); Luis Hernández Navarro (México); María del Carmen Barcia (Cuba); Mertxe Aizpurua (País Vasco); Andrés Gómez (Cuba/EEUU); Nayar López (México); Ramon Franquesa (España); Zoyla Lapique (Cuba); Margarita Zapata (México); Miguel Urbano (Portugal); Javier Corcuera (Perú); Alicia Hermida (España); Jaime Losada (España); Alejandro Torres (Puerto Rico); Juan Antonio Hormigón (España); Lidia Fagale (Argentina); Brian Becker (EEUU); Héctor Sosa (Argentina); Ana María Larrea (Ecuador); Ana Villareal (Argentina); Beatriz Chisleanschi (Argentina); Carlos A. Lozano Guillén (Colombia); Judith Rabinovich (Argentina); Sergio Arria (Venezuela); Elinor Cesín (Venezuela).



The Conspiracy to Divide Bolivia Must Be Denounced

The process of changes in favor of the Bolivian majority is at risk of being brutally restrained. The rise to power of an Indigenous president with unprecedented support in that country and his programs of popular benefits and recovery of the natural resources have had to face the conspiracies of the oligarchy and United States interference from the very beginning.

In recent days the increase in conspiracy has reached its climax. The subversive and unconstitutional actions of the oligarchic groups to try to divide the Bolivian nation reflect the racist and elitist minds of these sectors and constitute a very dangerous precedent not only for the country's integrity, but for other countries in our region.

History shows with ample eloquence, the terrible consequences that the divisionary and separatist processes supported and induced by foreign interests have had for humanity.
Faced with this situation the signers below would like to express their support for the government of Evo Morales Ayma, for his policies for change and for the sovereign constituent process of the Bolivian people. At the same time we reject the so-called Santa Cruz Autonomy Statute due to its unconstitutionality and the attempt against the unity of a nation of our America.
LA PRIVATIZACIÓN DE PEMEX:
UN CRIMEN DE LESA PATRIA
GRUPO SUR

Publicado en el suplemento

La Jornada Semanal,

La Jornada, México, 20 abril 2008.



PEMEX es la empresa más rentable de México. Los ingresos derivados del petróleo representan alrededor del cincuenta por ciento del presupuesto federal. Se trata de una gigantesca fuente de riquezas que siempre ha despertado el apetito de intereses privados de dentro y de fuera. La expropiación de la industria petrolera decidida por Lázaro Cárdenas buscaba convertirla en un puntal del desarrollo del país. La riqueza petrolera bien empleada es una palanca para nuestro futuro y factor de nuestra independencia.


Si se privatizara PEMEX, ¿a dónde irían estas cuantiosas ganancias? ¿De qué otra fuente obtendría el gobierno mexicano los formidables ingresos fiscales que dejaría de percibir? En verdad, la planeada "reforma" de PEMEX significaría la transferencia de fabulosas riquezas a manos privadas, principalmente extranjeras. Son incalculables los daños que se producirían al país. Debe decirse sin tapujos que quienes impulsan el despojo de la principal riqueza de México, conspiran contra la nación.


LA HISTORIA RECIENTE

Durante el sexenio de Miguel de la Madrid se optó por la venta de petróleo crudo en lugar de construir refinerías para elaborar nuestras gasolinas, mientras se desalentaron las ramas de la petroquímica, que permiten mayores ingresos y menor dependencia. Los sucesivos gobiernos priístas siguieron los dictados del Banco Mundial y de Estados Unidos: sabotear el desarrollo de pemex para ponerlo en punto de venta.


Lo lograron en parte al imponerle exacciones fiscales que ninguna empresa del mundo puede soportar, mientras se consiente al sector privado con una baja carga tributaria. Es por ello que en apariencia la empresa pública no gana y está en "crisis". Saqueando a PEMEX vía impuestos, escondieron su incapacidad para lograr una economía sana con un crecimiento sostenido. Correspondía a sus intereses seguir sangrando a PEMEX, en lugar de implementar medidas juiciosas y a favor de la nación. Asimismo, parte del guión para extenuar el sector energético fue el desmantelamiento de centros de investigación y desarrollo, como los institutos Mexicano del Petróleo, de Investigaciones Eléctricas y de Investigaciones Nucleares.

Con los gobiernos panistas esta vía llegó a su clímax. Vicente Fox y su pequeño grupo derrocharon los recursos adicionales que ingresaron al país gracias al alza internacional del precio del petróleo. Esos fondos no se utilizaron para fortalecer el sector productivo –incluyendo el campo y la propia industria petrolera–; se fueron al gasto corriente y a algunos bolsillos.


¿POR QUÉ LES URGE PRIVATIZAR PEMEX?

Este manejo ineficiente y sesgado de sucesivos gobiernos, tiene hoy a la economía del país en grave trance. Por un lado, hay una fuerte deuda interna que proviene de los Proyectos de Inversión Diferidos en el Gasto, PIDIREGAS; por otro, es un hecho que la crisis económica de Estados Unidos tendrá un fuerte impacto, pues habrá menos compras de nuestros productos, menos empleos para nuestros paisanos allá y menos remesas de éstos, que son nuestra segunda fuente de divisas.
Ante esta perspectiva, a la pequeña oligarquía dominante, al PAN y a sus aliados en el PRI, les urge privatizar a PEMEX, alegando que está en crisis. Según creen, llegaría dinero "fresco" que, una vez más, taparía sus ineficiencias y atenuaría la profundidad de los problemas. Y hasta sueñan que con ello podrían lograr en 2009 una votación que les permita acabar de saquear al país con leyes a modo dictadas en las Cámaras.
Pero lo que está en crisis no es PEMEX, sino el modelo socioeconómico que este grupo representa. Lo que quieren no es evitar una crisis al país, sino salvar el esquema económico y político que han impuesto, e incluso robustecer el régimen elitista mediante una nueva orgía de concesiones, negocios turbios y enriquecimiento fácil, mientras las mayorías se siguen empobreciendo.

Es evidente que el proceso de privatización impuesto desde hace veinticinco años no es el modelo a seguir. Carlos Salinas de Gortari reprivatizó la banca y vendió Telmex, lo que trajo grandes flujos de capital (1991-1993); aun así, se dio la crisis a fines de 1994 y no hemos salido del estancamiento. El proceso de privatizaciones ha continuado en la industria del acero, la aviación, la minería, la infraestructura, incluyendo la participación creciente de la inversión privada en la CFE y PEMEX desde 1997 hasta la fecha (en 2007, del total de la inversión realizada en pemex, el noventa y cinco por ciento fue privada). A pesar de ello, la economía y con ella la sociedad, van de mal en peor. Lo que se requiere es el cambio del modelo y la sustitución de ese grupo en el poder, que se ha caracterizado por su incompetencia, corrupción y carencia absoluta de sensibilidad social.

Estados Unidos y las grandes corporaciones son parte del festín que se prepara. A éstos les interesa intervenir directamente en la industria petrolera mexicana y ser rectores en el negocio. Los grandes yacimientos de petróleo fácilmente extraíble de Estados Unidos y de Arabia Saudita han llegado a su punto de declive. Apoderarse de los más importantes yacimientos es parte de su estrategia de dominio global. Estamos en grave peligro como país. Una vez que sus empresas se asentaran aquí, nada los detendría; pronto verían la manera de tener control, incluso militar, sobre nuestros yacimientos, plantas y gaseoductos.

Estimulados por el olor a negocios, desde el poder se ha comenzado a seducir o sobornar a funcionarios, legisladores, medios de comunicación y comunicadores para que se difundan mentiras o verdades a medias que impidan a la población tomar decisiones informadas. Falsedades como la carencia de recursos y de tecnologías propios para impulsar a PEMEX, campean cínicamente. Privatización y corrupción están indisolublemente hermanadas.
Algunas acciones de resistencia civil pacífica del Movimiento Nacional en Defensa del Petróleo


Los mexicanos no nos dejaremos engañar con galimatías para encubrir la privatización. Con la pretensión de ocultar su verdadero propósito, los traidores a la patria juran que no quieren privatizar PEMEX, sino tan sólo "reformarlo", "democratizarlo", "sanearlo", "modernizarlo" o promover "asociaciones" y "alianzas". Estos términos no son más que parte del nuevo Diccionario de Sinónimos Privatizadores. El fondo del asunto es que se permita a manos privadas aprovecharse de un re curso vital que es y debe seguir siendo público. Llámese como se llame, eso es privatizar nuestra empresa estratégica.

¿QUÉ OCURRIRÍA SI SE PERMITE LA ABIERTA PARTICIPACIÓN DE CAPITAL PRIVADO EN PEMEX?

Los que adquieran acciones de pemex u otras concesiones "legales", empresarios en busca de máximos rendimientos, muy pronto elevarían aún más los precios de los combustibles, presionarían al gobierno para que los impuestos con que hoy se sangra a PEMEX no se aplicaran a ellos. Finalmente las ganancias volarían lejos de aquí, como ya ocurre. Como consecuencia, se reduciría aún más el presupuesto para la educación pública, el sistema de salud, el campo, la cultura; habría mayor deterioro y pobreza. Los impuestos que no ingresen vía PEMEX tendrían que salir de nuestros bolsillos; hasta un sector de los empresarios se vería seriamente afectado. Tendríamos un gobierno aún más débil y sin capacidad para defender los intereses de la nación.
Vulnerando la Constitución, ya se han dado pasos privatizadores en el sector energético. Se trataría ahora de violentar por completo el orden constitucional desde reformas secundarias. La privatización, no hay que olvidarlo, se haría contra la Carta Magna. En el momento en que Estados Unidos implementa medidas de protección desde el gobierno, Dinamarca fortalece la presencia del Estado en sus empresas de hidrocarburos, y países como Holanda, Brasil y Argentina están dando marcha atrás en las privatizaciones, mientras Bolivia y Venezuela batallan contra la voracidad de las transnacionales petroleras, en México, a contracorriente, gobernantes obtusos y al servicio del gran capital, dan la espalda a la Constitución y se empeñan en privatizar lo que es de la nación.

UN GRAN PELIGRO PARA LA NACIÓN

Es un momento crucial. Con la privatización de PEMEX se cancelaría uno de los instrumentos fundamentales para proyectar nuestro futuro. Está en juego el porvenir de México como nación independiente y digna.
Vivimos uno de los momentos más graves de nuestra historia. Pero no nos cabe duda de que, con la Constitución en la mano, mexicanos y mexicanas de todas las edades, creencias y organizaciones, en todos los rincones del país, sabremos realizar una movilización nacional jamás vista para impedir este atropello, este descarado despojo. Levantaremos la meta combinada de impedir la participación privada en PEMEX e impulsar un cambio verdadero que logre desterrar el gran desorden económico, político, legal y social imperante. Que no se equivoquen los privatizadores. El destino de pemex no se decidirá en las sombras de los gabinetes o los despachos, sino en las calles.


GRUPO SUR
Guillermo Almeyra, Cristina Barros, Armando Bartra, Marco Buenrostro, Elvira Concheiro, Héctor Díaz-Polanco, Javier Flores, Víctor Flores Olea, Gerardo de la Fuente, Rosa Elena Gaspar de Alba, Arturo Huerta, Epigmenio Ibarra, Massimo Modonesi, Lucio Oliver, Carlos Payán, Consuelo Sánchez, John Saxe-Fernández, Gabriel Vargas Lozano y Sergio Zermeño.
DECLARACION DE CARACAS

Los participantes en el Encuentro "Armados de Ideas", Intelectuales y
Artistas por la Paz y la Soberanía de América Latina y el Caribe, reunidos en
Caracas, Venezuela, el 12 y 13 de abril de 2008, conmemorando la gesta
del pueblo venezolano en defensa de la Revolución Bolivariana y contra el
golpe de estado fascista del 11 de abril de 2002,


M A N I F E S T A M O S :

Nuestra mas firme solidaridad con la Republica Bolivariana de Venezuela y
con su pueblo en el proceso revolucionario que vive este país en el pleno
ejercicio de su legitimo derecho a la autodeterminación. Apoyamos
decididamente al Presidente Hugo Chávez Friás y a los procesos
organizativos populares que fortalecen día a día su marcha hacia un
Socialismo que se construye con imaginación, humanismo y creatividad.

Respaldamos, asimismo, al gobierno del Presidente Evo Morales Ayma, a
sus políticas de cambio y al proceso constituyente soberano del pueblo
boliviano. Condenamos el injerencismo del gobierno de Estados Unidos en
los asuntos internos de Bolivia y denunciamos las acciones divisionistas y
discriminatorias de los grupos oligárquicos de ese país contra los pueblos
originarios y el ejercicio de sus autonomías. Rechazamos el Estatuto
autonómico de Santa Cruz, declarado unilateralmente, por ser
inconstitucional y por ir en contra de la unidad de la nación multiétnica
boliviana.

Expresamos nuestra solidaridad con la digna posición de defensa de la
soberanía del gobierno ecuatoriano de Rafael Correa ante la violación de
su territorio perpetrada por el gobierno de Colombia, con el apoyo de
armamento, logística e inteligencia de Estados Unidos y como parte de la
estrategia de dominación imperialista en la región. Expresamos nuestra
indignación por la masacre de ciudadanos ecuatorianos, colombianos y
mexicanos, y rechazamos cualquier tipo de intervencionismo guerrerista
contra nuestros pueblos.

Externamos nuestra profunda preocupación por la crisis histórica que
atraviesa Colombia, y manifestamos nuestra firme solidaridad con la lucha
valerosa de su pueblo por una verdadera democracia que respete los
derechos humanos, por la realización de un acuerdo humanitario y la
búsqueda de una solución política negociada que ponga punto final a la
guerra prolongada que ha dejado cientos de miles de muertos, heridos,
desplazados y desaparecidos.

Urgimos a todos los gobiernos que forman parte de la llamada Misión de
Estabilización de Naciones Unidas en Haití (MINUSTAH), y en particular a
los de América Latina, para que retiren inmediatamente sus tropas y
contribuyan así al restablecimiento de la democracia con total respeto a la
autodeterminación del pueblo haitiano.

Condenamos enérgicamente las reiteradas agresiones del gobierno de
Estados Unidos a nuestros pueblos bajo el pretexto de la lucha contra el
terrorismo y el narcotráfico, y demandamos la extradición del terrorista
confeso Luis Posada Carriles a Venezuela, encausado por el homicidio
calificado de 73 personas a bordo de un avión de pasajeros.

Exigimos la inmediata liberación de los cinco cubanos presos injustamente
en cárceles estadounidenses por combatir el terrorismo de Estado dirigido
contra el pueblo cubano.

Denunciamos el injusto, cruel e ilegal bloqueo que por casi medio siglo,
Estados Unidos mantiene contra Cuba.

Rechazamos la adopción indirecta del plan Colombia por parte del gobierno
mexicano, el avance de la Iniciativa Mérida en ese país y la Alianza para la
Prosperidad y Seguridad de América del Norte, como mecanismos de
expansión de la intervención militar de Estados Unidos en América Latina.
Consideramos inadmisible que el gobierno de Felipe Calderón no
condenara la masacre realizada en territorio ecuatoriano en la que
perdieron la vida cuatro estudiantes de la Universidad Nacional Autónoma
de México, coadyuvando en la criminalizacion de las victimas y los
sobrevivientes de ese asesinato, mientras protestaba por la nacionalización
legitima del gobierno de Venezuela de la compañía CEMEX de capital
mexicano.

Nos pronunciamos por el fin de la dominación colonialista y neocolonialista
en Nuestra América y exigimos la independencia de Puerto Rico y de todas
las colonias que subsisten en el Caribe.

Convocamos a la movilización por el cierre y retiro de las bases militares
extranjeras en los países de América Latina y del Caribe.

Rechazamos la manipulación ecológica para transformar nuestro territorio
en proveedores de agro-combustibles con el fin de sustentar la suficiencia
energética de Estados Unidos.


Denunciamos el despojo de los conocimientos ancestrales de los pueblos
indígenas de Nuestra América y su comercialización por corporaciones
medicas capitalistas, así como el saqueo realizado por museos y
coleccionistas de Estados Unidos que exhiben y mantienen en su poder
cientos de miles de piezas de nuestros patrimonios históricos y culturales.

Los participantes en este encuentro nos comprometemos a continuar,
ampliar y profundizar la participación de intelectuales y artistas
-comprometidos con la lucha de los pueblos de Nuestra América- en la
batalla de las ideas, reconociendo las ricas experiencias que estamos
viviendo en la construcción del poder popular desde abajo, desde los
ciudadanos, desde los procesos de lucha de los pueblos indígenas. Como
declaro en esta reunión el Presidente Chávez, "solo el pueblo salva al
pueblo".

Caracas, Venezuela, 14 de abril de 2008.

Suscribimos:

Jorge Enrique Adoum (Ecuador)
Lisette Adoum (Ecuador)
Felix Julio Alfonso (Cuba)
Martin Almada (Paraguay)
Blanca Arredondo (Venezuela)
Sergio Arria (Venezuela)
Fernando Baez (Venezuela)
Tristan Bauer (Argentina)
Carmen Bohorquez (Venezuela)
Matias Bosch (Republica Dominicana)
Fernando Buen Abad (Mexico)
Manuel Cabieses (Chile)
Stella Calloni (Argentina)
Hernando Calvo Ospina (Colombia)
Alba Caroccio (Venezuela)
Felisa Casal (Venezuela)
Ana Esther Cecenna (Mexico)
Ender Cepeda (Venezuela)
Emma Elinor Cesin (Venezuela)
Ramon Chao (Espanna)
Yamila Cohen (Cuba)
Michel Collon (Belgica)
Luis Alberto Crespo (Venezuela)
Antonieta Di Stefano (Venezuela)
Nora Delgado (Venezuela)
Hector Diaz Polanco (Mexico)
James Early (Estados Unidos)
Blanca Eekhout (Venezuela)
Victor Ego (Argentina)
Jose Carlos Fazio (México)
Jorge Fornet (Cuba)
Eusebio Gironda (Bolivia)
Eva Golinger (Venezuela)
Reinaldo González (Cuba)
Ismael González (Cuba)
Belen Gopegui (España)
Marisela Guevara (Venezuela)
Amarilis Hernández (Cuba)
Daniel Hernández (Venezuela)
Roberto Hernández Montoya (Venezuela)
François Houtart (Belgica)
Jose Huerta (Venezuela)
Andres Izarra (Venezuela)
Gloria La Riva (Estados Unidos)
Cesar López (Cuba)
Gilberto López y Rivas (México)
Miguel Márquez (Venezuela)
Fernando Martínez Heredia (Cuba)
Humberto Mata (Venezuela)
Aristides Medina Rubio (Venezuela)
Juan Carlos Monedero (España)
Roberto Montoya (España)
Pedro Monzon (Cuba)
Luis Morlote (Cuba)
Carlos Noguera (Venezuela)
William Osuna (Venezuela)
Ivan Padilla (Venezuela)
Edgar Páez (Venezuela)
Senel Paz (Cuba)
Ana Maria Pellon (Cuba)
Regulo Perez (Venezuela)
Raul Perez Torres (Ecuador)
Jose Pertierra (Estados Unidos)
Abel Prieto (Cuba)
Jose Vicente Rangel (Venezuela)
Fernando Rendon (Colombia)
Maria Elena Salgado (Cuba)
Roberto Sanchez (España)
Mario Sanoja (Venezuela)
John Saxe Fernández (México)
Hector Seijas (Venezuela)
Pascual Serrano (España)
Francisco Sesto (Venezuela)
Hector Soto (Venezuela)
Jose Steinsleger (México)
Cesar Trompiz (Venezuela)
Romulo Ulloa (Venezuela)
Iraida Vargas (Venezuela)
Vicioso Luisa "Chiqui" (Republica Dominicana)
Daniel Viglietti (Uruguay)
Antonio Vulcano (Argentina)
Margarita Zapata (México)

viernes, 11 de abril de 2008

Paralelismos y autonomía de gestión





John Saxe-Fernández La Jornada, México, 10 de abril de 2008.


Calderón anunció en la promoción de su “iniciativa” que Petróleos Brasileños es modelo para Pemex, por lo que conviene revisar ambas experiencias. Los paralelismos se detectan en la sustancial entrevista de Fernando Siqueira, director de la Asociación de Ingenieros de Petrobras (La Jornada, 12/3/08, p. 28). Imitar cuando, como advierte Siqueira, la firma se abrió a empresas extranjeras, “que pronto se hicieron propietarias del crudo”, es un golpe a la Constitución y al pueblo, dueño del recurso. Fueron las reformas del Banco Mundial (BM) aplicadas por el gobierno de Fernando E. Cardoso en 1997, cuando llegó a su punto culminante el esquema para “llevar la empresa a un punto de venta” como sucede en México.

Petrobras, con una intención similar al asalto fiscal que Hacienda ejerce contra Pemex, fue obligada a comprar el crudo “a precios internacionales de 25 dólares por barril y venderlo en el mercado interno a 14 dólares”. ¿Objetivo? Como acá, secar los recursos para invertir y descapitalizar la empresa.

En 1995 Cardoso reprimió la resistencia a la privatización que incluía al sindicato petrolero. Prohibió a los empleados públicos trasladarse a Brasilia para evitar protestas contra sus “iniciativas”, “so pena de despido”. En México el gobierno de Salinas ordenó un asalto policial-militar no contra la corrupción sindical imperante en Pemex, sino para desactivar la resistencia del líder sindical La Quina a la privatización. En Brasil el BM lanzó una ofensiva para deshacerse de “pasivos laborales”. Fue implacable el despido de trabajadores y técnicos. La planta laboral se redujo de 60 mil a 30 mil empleados. Pero en esto Salinas y Zedillo estaban en la vanguardia: en 1989 Pemex tenía 280 mil trabajadores y en 1998 sólo 121 mil. En Imperialismo en México (Debate, 2005) se recuerda que el reajuste de 150 mil plazas en las áreas de perforación, construcción, mantenimiento y servicios generales no acarreó “una mayor eficiencia organizativa, funcional y productiva” como proclamó el BM y el director de entonces, Francisco Rojas, hoy “crítico” de la “iniciativa”, sino todo lo contrario.

Con la apertura formalizada en el TLC de licitaciones del sector público a empresas extranjeras bajo la noción de “trato nacional”, Pemex se inundó de contratistas del exterior porque el TLC derogó requisitos a esas firmas, como la utilización de insumos y servicios nacionales o el empleo de personal mexicano. Pronto nuestros trabajadores y técnicos fueron jubilados y desalojados a favor de sus pares del exterior. En Brasil también.

Aunque la cúpula priísta considere insultante el “diagnóstico” del gobierno sobre Pemex algunos de sus integrantes, como Rojas, cuya dirección en Pemex procedió con el desmembramiento administrativo de la empresa “sugerido” por el BM, ahora ofrecen diseños “alternativos” ajustados a los esquemas del Banco para incentivar el manejo privado del “portafolio de negocios”, por la vía de una no aclarada “autonomía de gestión”. Así ocurrió en Venezuela y Brasil. Cardoso “reconformó” el consejo de administración de Petrobras para incluir consejeros externos brasileños, “representantes de los intereses del sistema financiero internacional”. A partir de ahí, dice Siqueira, “se perdió el control sobre las decisiones y la información estratégica”.

Esa “autonomía” iría acompañada de una burocracia, como en Estados Unidos, auspiciada por las petroleras, “para administrar los hidrocarburos”: una “agencia federal separada de Pemex y encargada”, dice el BM, “de tareas de exploración y producción que negocia y firma los contratos sobre todas las áreas existentes y las que existan en el futuro”. (p. 43)

Coda: en Brasil y en México se despliega a los cuatro vientos un drama edípico que aporrea el inconsciente colectivo: Cardoso hijo rompió el sueño de su padre que proclamó: “o petroleo e nosso”. En México otro hijo desgarra su apellido ante una nación atónita, que resiste el despojo.



Andrés Manuel López Obrador tomó protesta en el Monumento a la Revolución a 38 brigadas –cada una integrada por 500 personas– que participarán en las acciones en defensa del petróleo. El político tabasqueño dijo que el movimiento va a actuar de manera ejemplar, sin caer en la violencia Foto La Jornada